La carta enviada por la secretaria de Estado levantó las alarmas entre las organizaciones que califican la solicitud de la ministra como una situación política impresentable.
Por Rodrigo Fuentes
Impresentable, una vergüenza, falta de liderazgo y nulo conocimiento de la importancia del evento internacional, fueron algunos de las opiniones recabadas a reprentantes de ONGs y del Centro de Investigación del Sistema Climático, después de conocida la carta que envió la Ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt a la ONU, donde aduce problemas de infraestructura para realizar la COP25.
La secretaria de Estado advierte en la misiva, que Santiago, entre otras complicaciones, no tiene un recinto adecuado para albergar la Conferencia de las Naciones Unidas sobre cambio climático en el mes de diciembre de este año. Fecha recordemos comprometida por el propio gobierno de Sebastián Piñera ante la comunidad internacional en Polonia, para ser anfitrión en la próxima reunión climática más importante del mundo.
Al respecto, la investigadora del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR)2, Pilar Moraga, calificó el hecho como una situación política impresentable. Agregó que esto también perjudica las negociaciones internacionales sobre cambio climático, que hasta hoy se han llevado sin problemas.
“Con esto se confirma la falta de coherencia, el doble discurso y la poca claridad sobre la urgencia planetaria, entre el Presidente y la Ministra de Medio Ambiente. Autoridades que no han sido capaz, y espero que esto se revierta en todo caso, pero si la COP25 no se realiza en Chile, el paso siguiente es que la ministra Smith presente su renuncia”, afirmó.
Para la directora de Chile Sustentable, Sara Larraín, el planteamiento de presidencia y del gobierno en general, es de extrema gravedad.
Asevero que estas acciones demuestran la falta de voluntad política del Ejecutivo para asumir compromisos sobre cambio climático, traducidos además en el rechazo a la firma del Acuerdo de Escazú, y por el fin de las termoeléctricas que en Chile utilizan combustibles fósiles como el carbón.
“Nosotros tuvimos una reunión la semana pasada con Cancillería y aún no tenían presupuesto para la COP. Creo que esto es grave y es importante tener en cuenta como sociedad civil, porque se debe ejercer mayor presión hacia el gobierno, para que sea coherente con lo que dice y lo que hace. Esto es patético, da vergüenza ser de un país que va con la farándula, se compromete, gana, y poco menos hay un festín por ser sede de la COP, y después dice que no hay condiciones. Entonces simplemente fue a hacer el loco, yo creo que esto viene reforzar la irresponsabilidad política vinculada a Escazú y creo que esto es grave y una vergüenza para Chile”, argumentó.
En tanto, para la directora de Fundación Terram, Flavia Liberona, existe falta de conocimiento y preparación de las autoridades al proponer a Santiago como sede de la COP25.
“Todavía tenemos el bochorno de no haber suscrito Escazú, luego el Pacto Migratorio, ahora la reunión más importante a nivel internacional sobre cambio climático, es como estar tirando para la cola, diciendo que no tenemos espacio y que la fecha no acomoda. En resumen, Chile está dando una pésima imagen internacional de, por un lado, querer liderar algo, y después darse cuenta que no lo puede hacer o no lo quiere hacer”, aseveró.
El gobierno ya habría propuesto un cambio de fecha para la realización de la COP25, para enero del 2020, sin embargo, el planteamiento no fue confirmado por la ONU, ratificando que la próxima versión de la Conferencia de las Partes se realizaría entre 2 y 3 de diciembre de este año en Santiago.
Leer en Radio U. de Chile.